Nuestra piel produce aceite que la hidrata. Este aceite es muy importante y no debe ser eliminado. Cuando te lavas la cara con agua caliente o incluso cálida, abres los poros faciales y esto causará una sobre-limpieza. Así es. La limpieza no sólo eliminará la suciedad superficial, también se deshará de este aceite natural que tu rostro necesita.
Si utilizas un limpiador facial con agua caliente la piel se seca y se vuelve escamosa, el acné se vuelve más fácil de conseguir, pero cuando tu piel está bien hidratada, la curación de tu piel incrementa. Ahora, cuando te laves la cara con un limpiador piensa que es mejor hacerlo con agua fría y no con caliente.
Hay más beneficios en lavarse la cara con agua fría:
1. Cuando se aplica agua fría sobre la piel, se despierta y estimula la circulación en todo el sistema. El agua fría es capaz de despertar literalmente los glóbulos perezosos que están inactivos en la sangre estancada y decirles que se muevan más rápido. Se ha demostrado que ducharse con agua fría es capaz de fortalecer el cuerpo.
2. A medida que el agua fría estimula las células de la sangre en el sistema, vuelca los capilares en los tejidos y los limpia de la acumulación de desechos y toxinas, que puede causar problemas de salud para el acné y otros. ¡Espera! ¡Hay más! Cuando la sangre corre de nuevo a la superficie, se limpia tu piel, se abren y relajan los poros y por medio de este proceso, las impurezas se liberan a través de la piel. Ducharse con agua fría puede ser un poco difícil para la mayoría, pero lavarse la cara con agua fría sin duda se puede hacer.
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